Tipos de detectores de movimiento: cuál es el mejor
Un dispositivo que nunca debe faltar en un sistema de alarmas es el detector de movimientos, que combinado con las cámaras de videovigilancia, los sensores de apertura de puertas y ventanas, detectores de humo, carteles disuasorios o paneles de control, permiten crear todo un sistema de alarmas que alerte y prevenga de cualquier situación peligrosa.
Para poder proteger el inmueble de la manera más eficaz y adaptada al presupuesto, es recomendable realizar un estudio de los puntos débiles en la seguridad del mismo. Todas las compañías de seguridad deberían ofrecer este servicio, para que de esta manera, se pueda establecer qué tipo de dispositivos se adaptan más a las diferentes necesidades de cada uno. En el caso de Securitas Direct, este estudio se ofrece de manera gratuita, y tras él, podrás decidir qué alarma Verisure es la más adecuada para tu inmueble.
En interiores: sensores infrarrojos
Los sensores de movimiento infrarrojos es una de las herramientas básicas y fundamentales en todo sistema de alarmas, ya que gracias a ellos es posible detectar una intrusión en el interior del hogar, negocio u otro inmueble. Estos dispositivos cuentan con la última tecnología y tienen la capacidad de detectar cualquier movimiento o actividad no autorizada en cualquier condición de iluminación.
Gracias a un lector electrónico que permite medir la luz infrarroja (IR) radiada de aquellos objetos que están situados en su campo de visión, pueden detectar la emisión de calor de cualquier gran objeto, como el cuerpo humano, y determinar la presencia de alguien no autorizado en la estancia. Estos dispositivos se denominan sistemas pasivos de lectura, ya que no emiten ningún tipo de energía.
La información que estos detectores de movimiento pueden dar es vital de cara a alertar adecuadamente al cliente y otras unidades de apoyo como la policía o un vigilante de seguridad. Además, es fundamental que todos los dispositivos estén conectados a una Central Receptora de Alarmas para que un especialista en seguridad pueda gestionar el salto.
En exteriores: detectores adaptados a condiciones externas
Cada condición ambiental puede cambiar el escenario que se pretende proteger, llegando a disminuir la seguridad del mismo. Por este motivo, existen detectores de movimiento adaptados a exteriores. Los detectores perimetrales son otro tipo de dispositivo cuyo funcionamiento es similar a los sensores para interiores, ya que funcionan también a través de visión infrarroja. Cuentan con la ventaja de poder soportar cualquier condición climática y tienen durabilidad. Altas temperaturas, lluvia intensa, la exposición al sol o el fuerte viento no suponen un problema para estos detectores gracias a su aislamiento térmico y sistema disipador de calor incluidos en su diseño. Su óptica está, además, adaptada para protegerse ante los posibles daños producidos por aves o insectos.
Igualmente, en las zonas exteriores es mucho más fácil que se produzcan falsos salto de alarma, debido a los movimientos que pueda haber, como objetos trasladados por el viento o animales pasando por la zona. Por ello, los detectores perimetrales combinan la tecnología infrarroja con la detección por microondas para evitar así que la alarma salte sin que haya sucedido ninguna emergencia.
Si quieres conocer mejor cómo funciona un sensor de movimientos, echa un vistazo al vídeo.